La usabilidad como clave del éxito en la estrategia omnichannel
Tras el Mobile World Congress, el eShow nos ha brindado el complemento digital que nos faltaba. La feria de los negocios digitales se ha presentado este año con proyectos innovadores y muy interesantes y ha reunido a grandes profesionales del sector para abarcar las principales tendencias en ecommerce, marketing digital, mobile y social media, entre otros.
Digital signage, estrategia omnichannel, multi-usuario, brand content, metodología lean/agile, transformación digital, economía colaborativa, playfunding…Estos y otros muchos conceptos han tenido su espacio estos días en el eShow Barcelona 2014, en el que hemos tenido ocasión de participar como ponentes en el área de Fast talks, gracias al espacio que nos cedió Claranet, proveedor de hosting y cloud en Barcelona.
Nuestro objetivo en esta edición ha sido el de introducir una de las piezas clave en la estrategia digital omnichannel, aunque a menudo sea la gran olvidada de los negocios digitales: la usabilidad. En palabras de Jakob Nielsen, «la usabilidad es un atributo de calidad que determina cómo de fácil es utilizar una interfaz», y hace referencia a los diferentes métodos que permiten mejorar la facilidad de uso durante el proceso de diseño.
La usabilidad además es una herramienta vital para que los usuarios puedan satisfacer sus necesidades de forma sencilla. Dicho esto ¿Cómo puedo aplicar la usabilidad a mis plataformas digitales? Para ayudaros en esta tarea os citamos los 11 principios heurísticos que definió Nielsen en 2003. Principios heurísticos de la usabilidad
- Claridad de propósito y de objetivos: la web debe comunicar de manera inmediata su propósito, función u objetivo.
- Visibilidad y orientación inmediata: los usuarios deben estar informados de su situación (ubicación y estado) y de lo que sucede en todo momento en la web.
- Adecuación al mundo y los objetos mentales del usuario lógica de la información: la web está adaptada al mundo real de los usuarios, su lenguaje, conocimientos…
- Reconocimiento más que memoria: la web se basa en el reconocimiento más que en el recuerdo para permitir al usuario interactuar con la web de manera fácil y productiva.
- Control y libertad del usuario: la página deposita el control en el usuario.
- Consistencia y estándares: la página es consistente internamente y con los estándares externos.
- Prevención de errores gracias a un diseño adecuado: el diseño de una web prevenir los errores de los usuarios antes de que se cometan.
- Flexibilidad y eficiencia de uso: la página debe facilitar y optimizar el acceso de los usuarios sean cuales sean sus características.
- Información y diseño minimalista: la página web debe evitar toda información o gráfico irrelevante y sólo incluye la información necesaria.
- Eficacia de los mensajes de error
- Documentación de ayuda: la documentación de ayuda está adaptada a las necesidades de los usuarios.
En conclusión, incorporar la usabilidad en las fases iniciales nos ayudará a reducir el riesgo de fracaso de nuevos proyectos y aumentará la facilidad de uso, lo que además se traducirá en un aumento de la productividad y/o rentabilidad de nuestra empresa.